La genialidad artística de Goya no puede entenderse sin su faceta de grabador. En sus grabados desarrolla toda una libertad imaginativa y una expresividad a veces mucho mayor que en la pintura. Goya utilizó el grabado en virtud de las posibilidades comunicativas que le proporcionaba, pero también supo sacar partido a sus posibilidades técnicas. Es el caso del aguatinta, un procedimiento derivado del aguafuerte que permite crear semitonos: se consigue protegiendo la lámina con polvos de resina, lo que provoca que esas zonas no sean atacadas por el ácido.
Goya llevó a cabo cuatro grandes series de grabados: los Caprichos, con intenciones satíricas (la estampa número 43 es la titulada El sueño de la razón produce monstruos, donde emerge su mundo de pesadilla); Los desastres de la guerra, que ofrece una terrible visión del mundo, presidido por la violencia y la muerte; La tauromaquia, sobre el mundo de los toros; y los Disparates, una visión siniestra y tenebrosa del mundo.
www.kalipedia.com
0 Comments
Publicar un comentario