En 2008 hizo pie en el país el fenómeno de las redes sociales. Explotó Facebook, la que mejor logró captar el espíritu local; llegó MySpace, de Fox Interactive, y la local Sonico siguió creciendo al tono.

El iPhone arribó oficialmente al país, así como las consolas de videojuegos Wii, de Nintendo, y PlayStation 3 y PlayStation Portable, ambas de Sony.

El iPhone llegó a su segunda versión este año, pero, sobre todo, produjo una nutrida estela de modelos semejantes. Entre tanto, los celulares en general alcanzaron un récord: a fines de 2008 habrá 4000 millones de móviles en el planeta, lo que para muchos analistas los coloca en la posición perfecta para heredar la revolución informática nacida en la década del 80. Es que ya no son sólo teléfonos: son computadoras de bolsillo.

Lamentablemente, el año que se va fue también uno de los más catastróficos en términos de seguridad informática. Aunque trajo algún alivio el arresto, en agosto, de once personas supuestamente relacionadas con el robo de 40 millones de números de tarjetas de crédito por Internet, la magnitud de esa cifra corta el aliento.

Ariel Torres
LA NACION